Puerto Rico, Ombligo del Mundo – Fuentes cercanas a Jesús Omar Rivera, alias «El Boricuazo«, han revelado a la prensa que éste, deprimido por la continua «mala racha» que ha tenido Puerto Rico en los últimos meses, ha acudido al alcohol para poder sobrellevar la pena que esto le ha causado. Expertos aseguran que sin la gesta patriótica del Boricuazo, el puertorriqueño promedio volverá prontamente a pensar que «no valemos nada» y recobrará su humildad en cuestión de semanas.
El Boricuazo en tiempos más felices, cuando aún podía sonreír al pensar en Puerto Rico
La gran incidencia de derrotas (¿qué derrotas?) que ha sufrido la Isla comenzó quizás hace ya varios meses con las acusaciones federales que se llevaron a cabo contra el Gobernador Aníbal Acevedo Vilá, las cuales, como él no pierde ocasión de recordarnos, más que una acusación criminal en su contra es un reto ante la sobernía de Puerto Rico y una afrenta personal a cada uno de los puertorriqueños. Más recientemente, se pueden contar también el hecho de que Ingrid Marie Rivera, representante boricua ante el certamen de belleza Miss Universe 2008 y usuaria aficionada del gas pimienta, haya quedado quincuagésimanovena en dicha competencia; el que Puerto Rico no haya cualificado para las Olimpiadas del 2008; y el hecho de que le majaran el hocico al púgil boricua Miguel Cotto. Esta secuencia de eventos fue la que sacó al bonachón del Boricuazo de sus casillas, obligándolo a recurrir a la bebida para poder ahogar las penas.
Ingrid Marie Rivera siendo entrevistada cuando todavía no había perdido zarrapastrosamente
El Boricuazo, un ente pluscuamboricua que ha dedicado su vida al estudio de datos que hacen a Puerto Rico especial con el propósito de deleitar al público boricua que ya pensaba que Puerto Rico era chulería en pote, se ha tomado todos esos reveses a pecho, y ahora anda borracho de esquina a esquina gritando «gotitas del saber» sobre la Isla y maldiciendo al «Ser Supremo que ha llovido tanta desgracia sobre nuestro terruño isleño». «¡¿Por qué, Dios mío, por qué?!», increpó un ebrio Boricuazo a un cielo apático. «¿Por qué hiciste a Puerto Rico el Ombligo del Mundo para luego llenarlo de pelusa maloliente? ¿En qué te hemos fallado? ¿Acaso no hemos compartido con la humanidad todas las bendiciones con las cuales nos agraciaste? ¿No le hemos regalado al mundo a J-Lo, a Ricky Martin, y a Daddy Yankee? ¡¿Qué más se supone que hagamos, darles a Luis Fonsi también?!», preguntó al borde del llanto.
El reggaetonero Daddy Yankee, parte del patrimonio nacional boricua
Jesús Omar admitió, entre estereotipados ataques de hipo de borracho, que su corazón «ya no está hinchado» (aunque, a juzgar por lo mucho que ha bebido, su hígado quizás sí lo esté), y que por el contrario siente «un vacío que antes sólo llenaba el amor patrio y la propensidad por la hipérbole». Sus más allegados están sumamente preocupados, porque aseguran nunca antes haberlo visto así, ni siquiera cuando «Lo Que Le Pasó A Santiago» no ganó el Óscar de Mejor Película Extranjera en el 1990. «Ayer me di un susto cuando, guiando (medio picaíto) en el tapón de las cinco, Jesús Omar gritó que se cagaba ‘en la madre de esta Isla y de sus malditos tapones'», reveló consternado un allegado del Boricuazo, quien habló en condición de anonimidad porque no quería que nadie se enterara que ellos jangueaban juntos. De hecho, tan consternados están todos sus amigos (los tres) que lo están vigilando constantemente para que no intente suicidarse: «Incluso le hemos limitado el acceso a sus potes de Boricuex, que todos sabemos lo que le pasó a Tony Croatto cuando se esmandó con esa pendejá’…«.
Tony Croatto, ejemplo muriente de que no se debe abusar del Boricuex
A pesar de que sus amistades han intentado de levantarle el ánimo al Boricuazo poniéndolo a ver programas culturales en el Canal 6, llevándolo alrededor de la Isla para que disfrute de la belleza sin igual de nuestra isla y comprándole fastuosos ajuares hechos exclusivamente con banderas puertorriqueñas, el querido historiador no ha podido salir de la depresión en la cual se encuentra sumido. «Ni siquiera lo pudimos convencer leyéndole la pendejá’ esa que escribió El Ñame la semana pasada diciendo que dizque el Comandante Cobra fue el que estuvo detrás de todas las cosas malas que han ocurrido en la Isla durante los últimos meses«, admitió el amigo anónimo. «Él está convencido que Dios está enojado con él por alguna razón, y que por su culpa ya Puerto Rico no vale ‘ni pa’ pool ni pa’ banca’ (whatever the hell that means). De hecho, ahora rehúsa que le llamen ‘El Boricuazo’, diciendo que ya no se merece ese título por haberle fallado a su gente, y pidiendo que de ahora en adelante el ‘Boricuoide’, porque asegura que su ‘boricuidad’ está en veremos».
Ni siquiera guiarle por el lado a las Tetas de Cayey logró aupar al acongojado Boricuazo
El otrora Boricuazo anunció que se siente «derrotado personalmente» por todos los desaires que ha tenido Puerto Rico últimamente, y que ya no encuentra ánimos para realizar su labor patriótica: «Me gustaría decir que estaré en pie de lucha para volver a subir el nombre de nuestra Isla en alto, pero la realidad es que tanta comedera de culo me ha dejado vencido. Lo que haré será quedarme aquí tranquilito en Chepo’s Bar & Grill hasta que Puerto Rico haya recobrado el lustre que tanto solía pregonar, y con nuevos bríos retornaré entonces a mis labores… ¡pero que conste que hasta ese momento no me voy a emborrachar bebiendo ron puertorriqueño, que es el mejor del planeta y por ende no me lo merezco, sino alguna porquería gringa, como Miller Light!».