San Juan, Puerto Rico – El Instituto Gastronómico Puertorriqueño, encargado con escoger cuál de todos nuestros platos típicos debería ser denominado como el plato nacional, ha determinado que este honor le pertenece al muy conocido «arroz con culo».
Justiniano Meraz, el Director de Instituto Gastronómico Puertorriqueño, explicó que el Gobierno autorizó un proyecto de ley (de ésos descaradamente dirigidos a desviar la atención pública de otras materias) para que el Instituto escoja un «plato nacional» que «reúna en sí todas las características que describen la esencia del Pueblo puertorriqueño». «Luego de un estudio exhaustivo de la cornucopia alimenticia que es la cocina de Puerto Rico», concluyó Meraz, «decidimos que el plato nacional no podía ser otro que el famoso ‘arroz con culo’, que permea el diario vivir de nuestra Isla».
Un ejemplo clásico de «arroz con culo»
Para dar un ejemplo de por qué se eligió ese «plato» para representar lo mejor de la gastronomía boricua, Meraz nos llevó en un tour alrededor de la Isla para enseñarnos por qué el «arroz con culo» es el que mejor nos representa. La primera parada fue cerca del Puente Dos Hermanos en el Viejo San Juan, donde se podía divisar la turba de los protestantes del proyecto de Paseo Caribe, enfrentándose a los policías que intentaban infructuosamente de mantener el orden, e incluso la visita sorpresa de José Aponte, el presidente de la Cámara de Representantes, quien deleitó a los presentes con insultos y gestos obscenos. «¿Ven?», dijo Meraz, apuntando con la mano. «Arroz con culo, en todo su apogeo: ponle par de tostoncitos por el la’o y una rajita de aguacate, y ya tienes un almuerzo completo ahí». El resto del tour ejemplificó otras muestras del delicioso manjar, como los tapones causados por policías «dirigiendo el tránsito» en las luces, tapones causados por reparaciones de la carretera donde a pesar de que nadie está trabajando hay varias millas de carriles cerrados, y tapones causados por curiosos eslembados mirando algún accidente o alguna nena linda. «Como ven», concluyó el Director, «ejemplos no faltan».
«Aquí ya se está hirviendo el arroz y echándosele los primeros trocitos de culo», señaló Meraz
Meraz explicó que Giovanna Huyke, la afamada y rotunda chef puertorriqueña y miembro vitalicio del Instituto, fue la que trajo el plato para la consideración del panel de jueces. «Giovanna fue la que nos sugirió escoger el ‘arroz con culo’ como el plato nacional, asegurando que nada nos definía mejor como pueblo, y que además era ‘bajo en calororías y alto en proteína’, dato cuya veracidad honestamente no quisimos cuestionar. Algunos panelistas, dubidativos, plantearon su preocupación por escoger un plato con un apelativo tan soez, pero Giovanna creía tanto en su propuesta que amenazó con despojarse de sus vestidos y enseñar sus nutridas carnes ante los ahí presentes, gritando: ‘¡Si no escogen el arroz con culo como plato nacional, me esnú’o to’a aquí, al frente de to’ el mundo! ¡Seré como la Carla Capalli de la causa del arroz con culo!’. Luego de un alargado ataque hemético de parte los panelistas, se decidió unánimemente el recipiente del galardón», finalizó Meraz, quien, al recordar el traumático suceso, se excusó para ir al baño.
Giovanna Huyke, la Carla Capalli de la causa del arroz con culo
El Director del Instituto Gastronómico Puertorriqueño intimó que, antes de que Huyke hiciera su fatídico y vomitoso strip-tease, había otros platos que estaban bajo consideración por los panelistas: «Por ejemplo, temporalmente jugamos con la idea de escoger el ‘arroz con jueyes’ como el víctor de nuestro certamen, por ser en esencia muy parecido a nuestra elección final, pero después de todo nos convencimos que ‘arroz con culo’ tiene un soupçon de je ne sais quoi que nos resulta simplemente très fanstastique«, dijo, en un derroche de comemierdería afrancesada.