El representante Sean Duffy, el autor de la medida quien sin tener que buscarlo en Google seguramente es republicano, explicó: «Primero que nada, tengo que confesar cuán orgulloso estaba de haber logrado que el nombre de la ley fuera ‘PROMESA’: ¡no saben cuántas horas estuve con el maldito diccionario de la RAE buscando una palabra en español que cuajara con el nombre que quería ponerle a la ley! Take that, Mrs. Gutiérrez from 8th grade Spanish! ¡You jablou muchou bueynou! Segundo, no entiendo por qué los puertorriqueños están tan envenena’os con esto de la Junta de Control Fiscal: ¡jelou, ya consiguieron que vinieran Mamá y Papá a arreglar su reguero! ¿De qué se quejan? Hasta permitimos que pertenezca a la Junta su ‘gobernador’ (aunque claro, con voz pero sin voto –¡y, si me preguntas, calladito se vería más bonito!), y dos residentes de Puerto Rico (quienes, por nuestras madres, jamás serán representantes de los fondos buitres). ¿Qué más quieren? ¿Alguien que vele por las habichuelas de los puertorriqueños? You guys are ADORABLE!«.
Al leer toda la crítica que ha recibido la Junta de Control Fiscal en la Isla, Duffy sometió una enmienda para retroactivamente cambiarle el nombre de su legislación a «Junta para Organizar la Deuda y Administrar a los Nativos quienes Se creen Emancipados», mejor conocida como «JÓDANSE». «¿Querían bugalú? ¡Cojan bugalú!», tronó el legislador. «Anoche no dormí buscando cómo arreglármelas para que las siglas de la ley fueran ‘JÓDANSE’, pero lo logré. Primero había tratado de ver si me salía ‘CHÚPENSEESA’, ‘ATÁNGANA’ y ‘KNEELBEFOREZOD’, pero no pude… Sin embargo, creo que ‘JÓDANSE’ recoge bastante bien lo que quería decir, así que la pegué. ¡Y si siguen con su quejumbrera, les juro que les espetaré una enmienda que obligue a su gobernador a treparse en la mesa y bailarnos la pelú’a al inicio de cada sesión de la Junta, transmitido por la televisión local!», amonestó, sin saber que ese sería el mandato federal más avalado por los puertorriqueños en toda la historia de la colonia.