«Es un fenómeno que se llama ‘estreno de cerebro'», explicó Luis F. Jiménez, jefe del cuerpo de bomberos. «No es la primera vez que hemos descubierto pequeñas nubes de humo que inicialmente parecen provenir de un incendio, pero en realidad son causadas por alguien que nunca ha tenido un pensamiento original en su cabeza a quien de repente se le ocurre algo. Y, quizás no sorpresivamente, ¡casi siempre a quien le pasa esto es a políticos!». A pesar de que muchos temieron que se tratara de otro incendio en la refinería petrolera CAPECO, Jiménez aseguró que desde un principio sospechó que ése no era su origen: «Me dio pestecita a cerebro quema’o, así que rápido busqué qué políticos vivían en el área, y voilà… ¡lo que nunca me imaginé es que fuera a ser Tommy!».
Por su parte, el presidente senatorial admitió con vergüenza: «Mala mía por el susto, mi gente. Esta madrugada estaba en el trono y parece que se me prendió el bombilllo, cuando de repente empecé a sentir esta peste a quema’o por todo el baño. ¡Esto nunca antes me había sucedido!». Al preguntarle a Rivera Schatz cuál fue esa brillante idea que tuvo, él respondió: «¡Me crees que ni me acuerdo! Estaba entre dormido y despierto: tú sabes cómo es. De todos modos, quiero asegurarle algo al Pueblo de Puerto Rico para que no se asuste: ¡por esta cabeza nunca más volverá a pasar una idea o pensamiento original!».