El galardonado acto de plagio sustrajo varias oraciones –algunas casi palabra por palabra– del discurso que en el 2008 diera Michelle Obama cuando su esposo Barack estaba postulándose para la presidencia. Las similitudes no pasaron desapercibidas por personas que no tienen nada mejor que hacer que ponerse a comparar las aburridas charlas dadas por las cónyuges de los candidatos en las convenciones nacionales, y el copiete descarado cobró notoriedad no solo por cuán desfachatado fue, sino también por cómo el equipo de Trump se negó a admitirlo, jurando y perjurando que Melania escribió el discurso ella solita, con la menor ayuda posible «y sin ni siquiera tener que usar su Speak & Spell».
«Aquí en Greenpeace queremos fomentar el uso, reúso y reciclaje», explicó Dewdrop Heatherwilde, directora general de Greenpeace, «ya sea de plásticos, papel o esencialmente inconsecuentes discursos políticos. Piénsenlo: al basar su discurso en el de Michelle Obama y usar algunas de sus oraciones sin cambio alguno, ¿cuánto papel no se ahorró? ¿Cuánta electricidad no se usó? ¿Cuántas neuronas no se quemaron? Es por eso que decidimos honrar la gesta incidentalmente proambiente de Melania Trump, y la exhortamos a ella a seguir modelando sus discursos tras los de Michelle Obama, y a Donald Trump a modelar las políticas ambientalistas de su administración tras las de Barack Obama. Es más, ¡si Donald Trump gana su pacto mefistofélico y gana la presidencia, y quiere gobernar exactamente como Barack Obama, que meta mano!»
Por su parte, Melania Trump aceptó de buen grado el galardón, exclamando con exuberancia sallyfieldezca: «You like me! Right now, you like me!«.