«Tenemos acceso a la cúpula del Partido Republicano. Yo estoy en la cúpula del Partido Republicano», aseguró Jenniffer González, en serio y sin inventos de este periódico. Al cuestionarle si esta supuesta cúpula es la misma a la que Trump le pasó el rolo y ha estado humillando constantemente desde que ganó la nominación, esta contestó en la afirmativa, sin ningún bochorno, mientras la observábamos con mirada bovína.
Al ver nuestras caras reflejando incomprensión, la candidata explicó: «Es que ustedes no saben cómo brega la política. Conmigo va a ser diferente, porque yo represento un sector que el partido necesita y que el señor Trump claramente va a valorar: soy mujer, soy hispana y represento un territorio sin voz ni voto en las eleccio–«, al tiempo que callaba mientras le bajaba una lagrimita porque por fin comprendió exactamente su importancia en la Casa Blanca de Trump.