«Coño, ya era hora que nos pudiéramos adjudicar un triunfo», manifestó un aliviado Fernando Martín, presidente ejecutivo vitalicio del PIP. «O sea, es que es bien difícil sentirse relevante cuando no tienes ni un trapo de senador o representante así sea por ley de minoría. Pero nada, la última habilidad que pierde un político es la de adjudicarse triunfos cuestionables. I still have it!«, exclamó triunfante mientras Rubén Berríos lo miraba atravesa’o por haber utilizado una frase en el idioma del colonizador.
Martín dejó saber que la próxima exigencia del PIP será que el gobierno de Luis Fortuño tiene que ser sacado del poder. De esta forma cantará victoria cuando este inevitablemente deje de ser gobernador, ya sea porque el Partido Popular lo destrone, porque pierda una primaria del PNP, porque se retire, porque se muera, o lo que pase primero, sea mañana o dentro de 20 años.