«Eliminen de Netflix esa historia, que nada tiene que ver con lo que sufrimos los millones de puertorriqueños», reza la petición, obviando completamente que la directora ha dicho clara y diáfanamente que su documental trata sobre el sufrimiento de tres puertorriqueñas en un hotel subsidiado por FEMA, y a punto de quedar en la calle. «¿Por qué tengo que soportar en Netflix un documental que no trata sobre lo que yo quiero que trate? ¿Por qué no habla sobre los que nos quedamos y no nos quitamos porque mira, #YoNoMeQuito?», imaginamos se pregunta el/la autor/a de la petición y 25 mil otros activistas de sillón.
Mientras tanto, otros aseguraron que el problema del filme es que no representa el caso típico del puertorriqueño que se fue y tampoco presenta la vista completa de lo que pasó, lo cual sería una crítica perfecta de no ser que, y repetimos, la directora explicó claramente que lo que la llevó a hacer este proyecto fue escuchar de una madre que se fue de PR a un hotel subsidiado por FEMA, y quiso hacer un documental sobre eso. Sin embargo, parece que el problema del documental fue que las vidas verdaderas documentadas no se conformaban a la narrativa que hubieran preferido los enajenados signatarios.
Por otro lado, el Instituto Checo de Investigaciones Baladís informó que 95% de las personas que firmaron esa petición también exigieron que se rehiciera Star Wars: The Last Jedi y la temporada final de Game Of Thrones.