«Pérate, ¿Islandia es un país?», preguntaron atónitas millones de personas a coro. «Yo sabía de Irlanda y Groenlandia… ¿pero ‘Islandia’? ¡Eso suena como que medio inventa’o!». En efecto, incluso muchos científicos desconocían de la presencia de la pequeña isla: «Aparte de volcanes que lo que hacen es joderle el parto a uno cuando uno quiere irse de vacaciones a otro lado, ¿por qué carajo se supone que yo sepa o me importe la existencia de la trapo de ‘Islandia’ esta?», preguntó Nigel Thorpleton, un geólogo británico que se quedó varado en el aeropuerto de Heathrow a causa de la humareda volcánica. Al responderle que de hecho la mundialmente conocida cantante Björk proviene de Islandia, Thorpleton exclamó: «¿En serio? ¿¡Y qué demontres esperamos para explotar en mil cantos a la trapo de Islandia esa!? Lo único que sale de ahí son dos cosas: esa porquería molestosa que lo que hizo fue arruinarme el día… ¡y cenizas volcánicas!».
Por otro lado, muchos estadounidenses aseguraron estar molestos por el hecho de que tantos países tercermundistas siguen «provocando temblores y explotando volcanes para que nosotros los habitantes de los países desarrollados nos enteremos de su existencia y para que nos importen temporalmente». En esa misma línea, muchos puertorriqueños se están preguntando si valdría la pena «volar pa’l carajo a El Yunque a ver si otros países aprenden dónde está esta isla y se enteran de lo que ha estado pasando aquí últimamente».